CSI.F Enseñanza Madrid
Central Sindical Independiente y de Funcionarios
15 de junio 2010
LOS RECORTES A LOS DÉBILES Y OTROS
TRISTES REMATES
Un principio elemental que, como otros muchos, establecieron los antiguos romanos afirmaba que los pactos se hacían para ser respetados. Este axioma, que redunda en la necesaria seguridad jurídica, ha sido dinamitado en España. El mes septiembre de 2009 el Gobierno firmó un Acuerdo sobre funcionarios con el sindicato CSI.F, y con otros sindicatos que pueden negociar a ese alto nivel. En ese Acuerdo, que fue duramente criticado por aquellos que no pueden negociar ni firmar nada en ese ámbito, recogía un pequeño incremento salarial, con una cláusula de revisión para corregir posibles desvíos. Ello pertenece a un pasado reciente, pero, a la vista de los acontecimientos, añorado.
De manera inesperada, ensañándose con los más débiles, tomando el camino fácil, el Gobierno español optó por atacar a los funcionarios, a los pensionistas y a los dependientes. Podrían haberse adoptado otras medidas; podrían haber empezado los recortes por otros ámbitos, por ejemplo, adelgazando la estructura hipertrofiada del estado español, ese monstruo autonómico tan voraz. Sin embargo, como dije, se eligió lo sencillo. Los funcionarios, los jubilados y los pensionistas cargaron con el despilfarro de unos gestores políticos poco hábiles. Claro que el aparato gubernamental y sus corifeos adujeron que esto se trata de una crisis mundial, frente a la que sólo se pueden tomar medidas excepcionales. Bueno. Puestos a fabular y a tirar balones fuera, resulta más creativa e interesante la vieja teoría de los contubernios judeo-masónicos de antaño.
CSI.F, el sindicato de los funcionarios, atendiendo a su responsabilidad, anunció una serie de medidas de protesta, sin ambigüedades, que incluía la huelga general de los empleados públicos. A esta corriente de protesta y movilizaciones se unieron los dos grandes sindicatos de clase, CC.OO. y UGT. Posteriormente, a esta plataforma de CSI.F, CC.OO. y UGT se adhirieron sindicatos más pequeños. El seguimiento de la huelga, con cifras menos elevadas de lo que cabía esperar, la bochornosa actitud de los sindicatos de clase respecto al sindicato profesional convocante ya forman parte de la historia.
Para colmo de males, otro remate aleve. En esta ocasión el ataque vino de la administración madrileña, de la Consejería de Educación. Hace pocos días se nos entregó una nota informativa sobre la suspensión del Acuerdo Sectorial que regula las condiciones laborales y económicas de todos los docentes públicos no universitarios de la Comunidad de Madrid (más de 50.000 personas). Esta suspensión sine diem, inopinada, unilateral, disparatada, supone otro ataque a los débiles. Resulta curiosa la coincidencia en la elección de víctimas entre la Administración central y la autonómica. Ahora la Consejería dispara contra los interinos y contra los que se van a jubilar, entre otros damnificados. Claro que recortar la mastodóntica estructura de las cinco DATs, recortar tantos cargos superfluos como pululan por muchas oficinas de la CM está fuera de programa. Otros países, que también han adoptado medidas contra la crisis, como Alemania, evitaron meter tijera en educación. Ahora bien, me olvidaba de que en esas latitudes están realmente preocupados y comprometidos con la enseñanza pública.
Javier Pérez-Castilla
Equipo Directivo CSI.F Enseñanza Madrid
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