El portavoz adjunto del Grupo Socialista en la Asamblea de Madrid, Adolfo Navarro, aseguró hoy que la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, y la consejera de Educación, Lucía Figar, prefieren las "tarimas, la tiza y la goma de borrar" a los ordenadores portátiles en las aulas que contempla el programa Escuela 2.0.
El portavoz adjunto del Grupo Socialista en la Asamblea de Madrid, Adolfo Navarro, aseguró hoy que la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, y la consejera de Educación, Lucía Figar, prefieren las "tarimas, la tiza y la goma de borrar" a los ordenadores portátiles en las aulas que contempla el programa Escuela 2.0.
Tras conocerse que la Comunidad está negociando las condiciones de implantación de este Plan al considerar que no son buenas las que presenta el Gobierno central, el Grupo Parlamentario Socialista consideró "lamentable" que no haya firmado todavía el convenio con el Ministerio de Educación para el desarrollo del programa que dotaría a 50.0000 alumnos de 5º de Primaria de la región de un portátil.
Así, consideró "estrafalario" que la Consejería de Educación "se niegue a colaborar en este importante proyecto con el Ministerio, argumentando que existen informes de expertos que desaconsejan por perjudiciales el tipo de pantalla de estos portátiles".
En este sentido, recordó que en un Pleno del pasado mes de diciembre, la portavoz socialista de Educación, Fátima Peinado, exigió que se hicieran públicos esos supuestos informes "sin que hasta el momento" los hayan podido conocer".
"Si la Comunidad de Madrid tiene constancia científica de que las pantallas pequeñas afectan a la visión y no actúa en consecuencia, está cometiendo un delito contra la salud pública permitiendo la comercialización de un producto supuestamente peligroso", afirmó el portavoz adjunto.
Y es que, para Navarro, "al Gobierno de Aguirre le gustan más las tarimas, las tizas y las gomas de borrar que las pizarras digitales, los portátiles y la red para el aprendizaje de los alumnos".
Navarro añadió que "si Madrid ocupa el farolillo rojo en recursos públicos destinados a la educación en el conjunto de las 17 comunidades autónomas, también ocupa este lugar en el número de ordenadores en las aulas" puesto que, según sus cálculos, en Madrid existe un ordenador por cada 10 alumnos en la educación básica frente a otras comunidades como Extremadura que tiene una ratio de dos alumnos por ordenador.
"Las falsas soluciones educativas del Gobierno Aguirre intentan recrear métodos del pasado y se niegan a que el futuro entre en nuestras aulas a través de nuevos métodos pedagógicos y la introducción de las TICs en los centros escolares, como hacen todos los países desarrollados", apuntó Navarro.
Para el socialista, este es otro ejemplo de que Aguirre "está más preocupada de enfrentarse al Gobierno central, incluso, cuando éste quiere transferir fondos estatales a la Comunidad de Madrid que pueden mejorar la calidad de la enseñanza madrileña".
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InMACUlada del Rosal
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